El 2013 ha sido el año de los bebés gorila en el parque de la naturaleza de Cabárceno. Dos de nuestras queridas gorilas han sido mamás y, pese al trabajo extra y la tensión que conlleva vigilar a dos animalitos tan pequeños que no puedes ni tocar, todos (trabajadores y visitantes) estamos disfrutando mucho de la experiencia.
Los bebés gorila nacen con apenas 2 kilos de peso, parece extraño que más tarde puedan alcanzar los 200 kilos; pero al nacer, los gorilitas son muy pequeños y vulnerables. Sólo tienen 2 reflejos (los mismos que los humanos): agarrarse con sus pequeñas manitas y succionar, el «instinto básico» ya que sin él no podrían alimentarse. Por ello sus mamás deben ser muy protectoras con ellos. Generalmente no sueltan a sus bebe ni un sólo segundo los primeros meses de vida. Todo el tiempo lo pasan limpiando, cuidando, dando de comer y cerciorándose de que los demás integrantes del grupo no molestan al bebé. Siempre curiosos, el resto de los gorilas, necesita ver y tocar al nuevo miembro de la familia pese a que las mamás les harán mantener la distancia durante algunos meses. Los gorilas son sociables, sí, pero muy protectores y responsables con sus crías.
Un bebe gorila sólo debe preocuparse de comer y dormir para hacerse grande y fuerte pero, con el tiempo, tendrá además que aprender de su madre su lenguaje y todas las normas que debe adoptar para vivir en la sociedad gorila, una sociedad tolerante pero compleja. Es una ardua tarea conocer todo lo que puede y no puede hacer, aunque los gorilas tienen mucho tiempo para hacerlo. Pasarán al menos tres años sin separarse apenas de su madre: durmiendo con ella, jugando con ella, intentando robar la comida que se le cae, aunque durante estos años seguirán tomando leche de su madre ¡siempre tienen curiosidad por saber qué come mamá! En general, pasarán estos tres primeros años observando a su madre constantemente y aprendiendo todo de ella.
¿A quién no le gustaría tener a su madre y toda su familia en cada momento atendiendo todas sus necesidades, siempre resguardado y calentito en los brazos de mamá y jugando a cada momento con toda la familia, sin preocupaciones. Crecer y vivir en un entorno estimulante, educativo y protector, una verdadera familia…? ¡A mí me encantaría!
Como creo que ya he comentado otras veces, los gorilas, como nosotros, son «animales culturales» esto quiere decir que su comportamiento viene determinado por lo que aprenden durante su infancia y los primeros años son fundamentales. Esto también implica que los caracteres de las madres influyen mucho, más de lo que imagináis, en el carácter que finalmente desarrollará el bebe gorila.
Nuestros dos gorilitas por el momento son muy pequeños y todavía no pueden mostrarnos su personalidad completa, principalmente porque todavía la están formando, pero podemos ir observando día a día como van surgiendo pequeñas diferencias en sus conductas que han ido aprendiendo de sus madres.
Moja, la primera mamá, es una gorila muy juguetona y bastante despreocupada; es muy alegre y activa por lo que generalmente siempre está buscando algo con lo que entretenerse. No suele pasar mucho tiempo tranquila pues, incluso cuando está descansando, sigue jugando con lo que tenga a mano, eso sí, mientras esta tumbada. La hija de Moja, vamos a llamarla Minimoja ya que todavía no tiene un nombre oficial (el nombre de un gorilita es una decisión muy importante, no puede tomarse a la ligera) es una gorilita muy despierta e independiente con sus escasos ocho meses.
Ha tenido que espabilar muy pronto para no caerse en alguno de los múltiples juegos de su madre. Así que desde bien pequeñita se agarraba sin ayuda. Además, mamá Moja quiere que su hija juegue con ella desde que nació. Por lo que la ha estimulado mucho para que aprenda a andar y trepar muy rápido. Así ha conseguido que Minimoja sea una gorila muy activa, fuerte, juguetona, valiente, curiosa y precoz. Muestra conductas muy adelantadas para su edad, como viajar en la espalda, trepar por todas partes o separarse varios metros de su madre. Me hizo muchísima gracia la primera palabra que dijo, fue algo así como: “¡Déjame mamá!”, porque quería seguir trepando y su madre consideraba que ya estaba suficientemente alto.
Por su parte Chelewa, la otra mama gorila, pese a ser también muy juguetona, puesto que ambas son gorilas muy jóvenes, es una gorila muy protectora. Se pasa todo el tiempo agarrando a su bebe para que no se mueva ni un milímetro, lo limpia cuidadosamente cada 10 minutos y parece que no hay un sólo segundo que no se preocupe por él. Como resultado: Mininiky (tampoco tienen nombre oficial) es un poco vago y quejica. Apenas tiene 2 meses y es muy pronto para determinar cuál será su carácter final, pero de momento, presenta conductas y actitudes que no tiene la pequeña Minimoja. Mininiky apenas se agarra. No lo necesita porque su madre está constantemente preocupada de que no se caiga, así que él no tiene la necesidad de esforzarse porque sabe que nunca le dejará caer. Además protesta a menudo porque quiere mamar todo el tiempo y las veces que Chele no le deja (porque ella también se cansa de sus demandas constantes de comida) lloriquea, cosa que Minimoja no ha hecho nunca. Así consigue que al final le den más de comer, ¡es un tragón!
Como veis, las mamás gorilas son madres ejemplares que cuidan sin descanso de sus bebés durante muchos años, tiempo durante el cual los pequeños aprenderán todo lo necesario para vivir y desarrollarse dentro de la sociedad gorila. Pero, al igual que los humanos, cada uno adquirirá unas características únicas y especiales que dependen de los caracteres de sus madres, de sus circunstancias personales y en general de las características particulares del grupo de gorilas en el que vive, que le ayudan a formar su personalidad final, única e irrepetible.
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Vocabulario:
conlleva (conllevar): implica, relaciona una acción con otra.
vulnerables: frágiles, que necesita protección.
agarrarse: coger fuerte con las manos.
succionar: chupar, usar la boca para meter algo dentro.
protectoras: que protegen o intentan proteger.
sueltan (soltar): contrario de agarrar, liberar.
cerciorándose (cercionarse): asegurarse, intentar estar seguro de algo.
ardua: difícil, complicada.
robar: quitar algo a alguien sin su autorización o sin pagar por ello.
resguardado: protegido, a resguardo, guardado.
viene determinado: tiene un origen que lo hace así.
surgiendo (surgir): aparecer, nacer.
juguetona: que le gusta jugar.
tener a mano: tener cerca.
espabilar: despertar su inteligencia, madurar, crecer.
trepar: subir por donde no hay camino, escalar.
precoz: adelantada a su tiempo o su edad, que hace cosas típicas de alguien con más años.
quejica: protestón, llorica, que protesta fácilmente por todo.
lloriquea (lloriquear): llorar fingidamente, empezar a llorar.
ejemplares: que pueden servir de ejemplo o inspiración.
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Thank you, Lucy, for this intimate and insightful glimpse into gorilla nature and nurture. I think gorillas are THE most fascinating creatures. I envy you. Ever since the Prague zoo turned off its online cam, I’ve been starved for anecdotes about, and observations of, gorilla behavior. Please continue to share. You have the knowledge and the knack!