La eñe es esa letra que los españoles echamos de menos en los teclados cuando estamos en el extranjero. Es también la decimoquinta letra del alfabeto español y no proviene del latino, algo que la hace especial. Pero, ¿sabes de dónde viene o por qué tan pocos idiomas la utilizan?
En la Edad Media, cuando el castellano estaba empezando a fijarse en textos por escrito, los monjes, que copiaban y traducían textos en los monasterios, tenían la costumbre de abreviar palabras para ahorrar espacio y tinta. De esta forma, cuando tenían que escribir el grupo de consonantes latino NN lo empezaron a hacer con una n menor encima de una de tamaño normal. Por ejemplo, en una palabra en latín como ANNUS, que evolucionó con los siglos a la palabra actual “año”.
De esta manera, además, los copistas estaban representando un sonido que en latín no existía y que empezó a aparecer en las lenguas romances tras la caída del Imperio romano, el sonido palatal y nasal eñe, y evitaban a su vez la confusión de nn con la letra m. Esta pequeña ene superior con el tiempo pasó a ser una pequeña raya, la actual virgulilla. Esta última palabra proviene del latín VIRGULA (vara), que a su vez viene de VIRGA, de modo que la vírgula es, según el significado etimológico, una pequeña vara.
https://www.youtube.com/watch?v=Mb4w_nq8pmk
Supereñe es un personaje infantil de un programa de televisión que siempre habla con palabras que tienen la letra eñe.
La letra eñe también existe en otras lenguas como el gallego, el euskera, el quechua o el guaraní, pero el sonido (ɲ, según el Alfabeto Fonético Internacional) se representa por escrito de distintas maneras en muchas otras, según la opción que decidieron los copistas de la época. En catalán, por ejemplo, este sonido se representa mediante el dígrafo (es decir, dos letras) ny, en portugués con nh, y en francés e italiano con gn.
Vocabulario:
teclados: pieza con teclas que usamos para escribir en el ordenador.
decimoquinta: 15ª
fijarse: mantenerse, guardarse, no cambiar.
monjes: personas religiosas que viven en un monasterio.
abreviar: hacer más breve, acortar, reducir.
copistas: personas que copian textos para multiplicar las copias y garantizar la existencia en el futuro de los textos.
vara: rama delgada, limpia y sin hojas; palo.
Hola Irene,
polacos tienen también su ñ polaca, es la letra ń.
Por ejemplo koń – un caballo.
Pero si en una palabra existe una combinación como ni ej. niania – una niñera – esta n se pronuncia también como ń. Normalmente n se pronuncia más duro ej. nowy -nuevo. Por eso tenemos tendencia a pronunciar la combinación ni como ñ la diferencia es muy, muy fina pero hay verbos especiales ej. tenía y teñía ambas formas en imperfecto (teñir, tener).
Por suerte sus significados son absolutamente distintos 😉
Saludos Bartek
No tenía ni idea. ¡Muchas gracias por el aporte, Bartek!